

Torres de la catedral de Notre Dame en París, Francia.	La Trinidad bajo la forma de 3 guanacos en La Payunia, Mendoza, Argentina.	Octógono de la Virgen en la Catedral de Buenos Aires.

	París, LA Payunia y Santa María de los Buenos Aires…

	Elegí estos 3 lugares especiales del mundo en donde he caminado, buscado y encontrado. Mucho podría hablar sobre ellos pero ahora estoy aquí compartiendo esta experiencia con usted. Le invito a realizar una travesía diferente, acompáñeme en este viaje desde su propia historia. Elija sus 3 lugares especiales rellenando sus nombres en los siguientes espacios en blanco. Pueden ser en un mismo país o aún en la misma ciudad. 1- 2- 3-

Ahora bien, todo tiene 3 llaves, azufre, mercurio y sal, para la alquimia, o alma espíritu y cuerpo. Spinetta cantó sobre la eternidad del Uno y cómo de ese sinfín nacieron todas las cosas: "El sinfín, se cansó, y se dio, hasta nacer, toda cosa se hizo en tres llaves."

Entonces partamos del número 3, la suma de los tres lugares. Más allá de toda disposición de la geografía divina, la Sagrada Geometría nos lleva a pensar que 3 puntos conforman los ejes radiantes de un triángulo, símbolo por excelencia de la SANTÍSIMA TRINIDAD.

"Conocer los tres fundamentos hereditarios del hombre es poseer la ciencia. El alma que viene de Dios, el espíritu que viene de los astros, el cuerpo que viene de la tierra." (Louis Cattiaux, M.R. 2/88).

El 3 polariza ya que el triángulo puede girar hacia arriba o hacia abajo.

El triángulo ascendente representa a la luz y contiene al elemento fuego y al elemento aire.

El triángulo descendente representa a la materia y contiene al elemento agua y al elemento tierra.

Son dos vías simbólicas empleadas por los iniciados…

El triángulo ascendente activa, espiritualiza, invisibiliza y volatiliza.

El triángulo descendente pasiva, materializa, hace visible y coagula.

Pero cómo nació el triángulo? Un principio único, UNO o PADRE, plasmó el reflejo de sí mismo en el HIJO, y éste hizo lo propio con el Espíritu Santo. Así el triángulo encierra tres dualidades (3 x 2 = 6) las basales de concreción en fase luz o materia en este plano visible que habitamos temporalmente y en los otros 9 planos invisibles. Si representáramos a la creación como una torta ésta tendría 10 capas. Nosotros estaríamos en la última capa de abajo, la más pesada.

"La condensación de la luz en materia no sucede en una sola etapa. La luz, elemento Fuego, se coagula en el elemento Aire, después en el elemento Agua y por último en el elemento Tierra." Jean Dubuis

Todo lugar o morada en el universo es una reunión de estos dos triángulos de fase luz y materia. Es cierto y verdadero que DIOS está en todas partes y más cierto aún es que en cada punto DIOS se manifiesta con una luz y una materia diferente. Si pudiéramos medir la dosis y la calidad de cada uno de los 4 elementos en nuestros 3 lugares elegidos comprobaríamos que vibracionalmente son diferentes. Como resultado las experiencias vividas serán también diferentes.

Ahora le propongo que elija un lugar especial de los tres que corresponda en su vida al triángulo ascendente.

Y por oposición elija uno de los dos lugares restantes que corresponda al triángulo descendente.

Al lugar del triángulo ascendente colóquele el símbolo del alma o azufre.

Al lugar del triángulo descendente colóquele el símbolo del cuerpo o sal.

Al lugar restante colóquele el símbolo del espíritu o mercurio.

Cuál es el hilo secreto que une estos lugares y nos hace ser y estar en ellos?

Muchas veces me hice esta pregunta, y más allá de una sola palabra no encontré aún otra respuesta más cierta: el Fuego. Ampliaré la respuesta: la guía que brinda al buscador el fuego secreto. Es como la luz de una lámpara que muestra el camino en medio de la noche.

Spinetta lo describe sabiamente como "la sombra del aliado". "Quien posee el fuego secreto puede adquirir y renunciar a todo sin perjuicio." (Louis Cattiaux, M.R. 5/27).

Muy pocos ven este fuego y sabiamente callan. Ciertos espagiristas conocen su temperatura casi exacta. Algunos más sólo lo presienten. Otros pocos conocen su existencia en teoría, pero la gran mayoría de los humanos lo desconoce por completo.

No se debe confundir su poder con la luz del sol. Dubuis dice "Es una regla general de que las energías invisibles vienen de las cosas invisibles y las energías visibles proceden de las cosas visibles. La energía del fuego sobre la tierra se emite por lo que llamamos el sol invisible o el sol negro y a través de él llega a la atmósfera terrestre. Esta energía es indeterminada."

Y es verdad. El fuego secreto está en todas partes en mayor o en menor medida. Es el corazón de la vida. Pero no todos vemos la Obra de DIOS de la misma manera y paralelamente es la Sabiduría de DIOS que corporiza su luz siguiendo un plan divino que nos atraviesa y redefine nuestra voluntad.

Entonces reina la confusión y ni las aceitunas escapan a ello.

Hay quienes todavía piensan que todas las aceitunas de un mismo frasco tienen exactamente el mismo sabor, consistencia y aroma. Sentado frente a un frasco de riquísimas aceitunas griegas, ubicado estratégicamente al lado de mi escritorio, yo pregunto: ¿Son todas realmente iguales o tenemos tendencia a promediar nuestra percepción de las cosas?

La conciencia es el poder de fuego de nuestra percepción. Y dejo aquí un buen consejo aprendido con los años. No debería estar en nosotros intentar modificar la percepción de las personas. Es Dios quien revela y es El quien sabe muy bien que las aceitunas tienen cada una un aroma, un sabor y una forma diferente. Así es, percibimos sólo lo que nuestra conciencia ha sido preparada para reflejar, entonces no es de extrañar que millones de personas caminaron los últimos cientos de años alrededor de la catedral de Notre Dame de Paris sin enterarse que el templo todo contiene la fórmula práctica de la piedra filosofal. Yo era uno de ellos, pero un encuentro en la puerta de la Virgen de Notre Dame cambiaría mi destino para siempre hace ya muchos años.

Antes de seguir es hora de decir esta oración, que es una parte de una mucho más grande de un encuentro de diciembre del 2012:

"Puerta del Señor, Nombre inmaculado, encarna en mi verbo y abre mi corazón a los oídos de la verdad, que nunca perece. Yo reposo en ti, como reposa la lluvia cargada de fuego en la santa tierra. Yo reposo en ti pese a todos mis pecados, en cada palabra de esperanza. Amén.

Ahora le invito a colocar una frase a cada lugar especial

En mi caso:

París: monumento vivo de la obra alquímica

Payunia: fuego de Dios en estado puro

Santa María de los Buenos Aires: crisol de buscadores

y a rezar esta parte de la oración del punto sagrado del mismo encuentro:

"Cuando nací, un punto se abrió en el cielo y de ese punto caí, y me encarné en esta bendita tierra. Porque he venido a redimir mi alma y mi espíritu, purificando mi tierra, porque he venido a Ser aquello que no sé pero presiento, una obra larga y duradera que me encuentre del lado de los justos; y espero que la Santísima María, Reina del Conocimiento, me enseñe cada uno de los pasos partiendo de un punto, punto sagrado, punto vital, punto Uno. Amén."

Medite sobre estos tres lugares.

Busque signos sagrados.

Comience a atar los cabos de las experiencias vividas.

Preste mucha atención a sus próximos tres sueños.

Honre a sus aliados espirituales en el Cielo y en la Tierra.

Dele gracias a su ángel.

Y si elige la Espagiria como vía de conocimiento no olvide estas palabras de Cattiaux: "El Sabio dispone la simiente y Dios la abre por medio del agua y del fuego."… El triángulo descendente y el triángulo ascendente… ¿Lo recuerda?

Tres puntos

Tres lugares especiales

Tres principios

Sólo resta activar tu búsqueda en 3 pasos:

1) La conciencia es un río cargado de fuego. Ponerse al abrigo de Dios y alabarlo. El es el único hacedor del Fuego.

2) Caminar a ese río sagrado cada día y golpear su puerta hace al buscador perseverante. Cattiaux dice: "el conocimiento no experimentado es nulo."

3) La perseverancia es hermana de la santa Fe. Creer para ver.

Bendito fuego ilumine tus días

Sergio Etcheverry